¿Cómo definiría usted la innovación?

Innovar es alterar algo introduciendo novedades y, en el mundo de la investigación y el desarrollo, es la última y fundamental parte, la que crea más valor añadido. Con frecuencia es la que pone un desarrollo a disposición de los usuarios y, por lo tanto, se trata de una pieza básica de nuestro sistema de ciencia y tecnología. Una pieza, por cierto, a la que debemos prestar mucha atención porque es la que hace posible el éxito.

Este año, la Asociación Española de Comunicación Científica celebrará su 40 aniversario, ¿cuál ha sido su evolución desde su fundación?

Pues hemos pasado de ser un colectivo de periodistas especializados en escribir de ciencia a incluir a quienes, desde otros ámbitos, se preocupan y se ocupan también en la comunicación de la ciencia, la investigación y la innovación, es decir, que además de periodistas tenemos, por ejemplo, gente que trabaja en museos de ciencia o investigadores a los que la divulgación les ocupa una parte de su tiempo.

¿Cuáles son los principales objetivos de la Asociación que preside?

Bueno, somos una asociación gremial, así que procuramos defender los intereses de nuestros asociados y velar por la independencia y la objetividad de los contenidos informativos y la libertad de expresión. Nos interesa especialmente organizar talleres y cursos de formación y actualización, facilitar el diálogo, las relaciones y el acceso a las fuentes de información y promover actividades informativas. También promovemos la reflexión sobre nuestra especialidad y el contacto entre quienes la practican y procuramos ser un interlocutor válido ante toda clase de organismos e instituciones.

¿Con cuántos socios cuenta actualmente la Asociación y qué servicios se les ofrecen desde la misma?

Somos unos 250 y, además de lo que se deduce de la respuesta anterior, sobre todo lo referido a cursos, talleres y seminarios, encauzamos las relaciones con los colegas de Europa, lo que supone muchas posibilidades de viajes de formación y, en algunos casos, ofertas de trabajo. Además, nuestro carnet abre puertas, como los carnets de prensa. En todo caso, está toda la información en nuestra página web: www.aecomunicacioncientifica.org/

En alguna ocasión ha afirmado que la innovación si no se comunica es como si no existiera, ¿hasta qué punto es importante para las empresas innovadoras que realicen esfuerzos en esta dirección?

A mi juicio, es fundamental, tanto para las empresas como para los investigadores, en las tres fases: investigación, desarrollo e innovación. Hace tiempo que el buen paño no se vende en el arca, hay que sacarlo y mostrarlo. Dar a conocer lo que uno hace es muy importante de cara al éxito comercial, sobre todo porque el escrutinio de la información científica no tiene que ver con la publicidad y ofrece un plus de seriedad y de rigor que suele ser muy positivo tanto para el público como para quien informa de algo. En Sociedades en las que la comunicación científica tiene más arraigo este debate ya no existe, está superado. A nadie se le ocurre hacer innovación y no contarlo, aunque solo sea porque con frecuencia se concursa para obtener fondos, públicos o privados; que el producto o el desarrollo sea conocido hace que quien tiene que decidirlo ya sepa de su utilidad o la novedad.

¿Qué dificultades se presentan a la hora de comunicar en materia de innovación?

Pues creo que la más difícil de salvar es el deseo de hacerlo. Y si uno está decidido a comunicar lo que hace en este campo, entonces lo mejor es contar con profesionales de la información científica. Hoy día hay muchos canales y muchas posibilidades de llegar al público al que uno quiere llegar, que en algunas ocasiones ha de ser más amplio y en otras más específico.

¿Cuáles son los sectores más implicados a la hora de comunicar sus aportaciones en investigación y desarrollo?

Los que tienen costumbre de hacerlo y han visto los buenos resultados que da. Por ejemplo, los relacionados con el espacio y el mundo aeronáutico, el mundo biosanitario, en concreto las investigaciones farmacológicas, las tecnologías de la comunicación…

Una parte importante de la actividad de la asociación, se centra en la organización de seminarios, coloquios, cursos y reuniones ¿cuáles son las temáticas más tratadas?

Todas aquellas que tienen que ver con el ejercicio de la profesión. Redes, campo en el que hacemos tradicionalmente una jornada de mucho éxito, investigación biológica, naturaleza, espacio… Y también las relacionadas con el hacer propio de la ciencia, como publicaciones científicas, financiación de la ciencia, etc.

¿Cuáles son los proyectos que tiene en mente la Asociación Española de Comunicación Científica de cara al futuro?

Incrementar nuestro tamaño porque es básico para poder hacer más actividades. Vivimos exclusivamente de las aportaciones de nuestros socios, de las cuotas, y las actividades no las hacemos para ganar dinero sino para ser útiles, así que dependemos del tamaño para dar servicios. Queremos ser el referente español en comunicación de la ciencia y creo que, en buena medida, ya lo somos aunque solo sea porque nuestros socios son quienes están haciendo la comunicación de la ciencia en España.